...Amortajada vive aún mi esperanza y las semanas mueren en el casi intento, en el anhelo que no es más que eso. No era posible olvidar las tiernas horas ni tampoco las impotentes, que clavaban en mí la espina de la imposibilidad. Vivo por este sueño que habita en mis días tan arcano, tan adentro durmiente, brillando cada vez que lo pienso, que lo siento... quisiera haber comprendido esto tan fuerte que me domina y se escapa de mis manos como agua.
Los días pasaban lentos decía yo, pero hoy todo corre. Los minutos apenas alcanzan a ser y se van, desaparecen y la vida se me escapaba tan veloz acabando con estas tardes de pronto, en un tiempo en que todo cae: las hojas, la lluvia, la noche, el frío. Y las calles se vuelven crujientes y opacas.
Me había convertido en una estatua, movida solamente por su existir. Había escuchado voces, pero no era él...
viernes, 25 de mayo de 2007
lunes, 14 de mayo de 2007
RETORNO
Mi plegaria abandona su turno
me alejo, te alejas, qué absurdo
preludio sin forma, imagino
centinela de lo que fue mío.
Dormitando, bebiendo, te miro
te oigo aunque nada hayas dicho,
con mi mutismo te recibo,
aunque nunca por mí hayas venido;
me alejo, te alejas, qué absurdo
y mi plegaria abandona su turno;
todo vuelve a ser distinto,
todo vuelve a ser lo mismo.
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