Mi plegaria abandona su turno
me alejo, te alejas, qué absurdo
preludio sin forma, imagino
centinela de lo que fue mío.
Dormitando, bebiendo, te miro
te oigo aunque nada hayas dicho,
con mi mutismo te recibo,
aunque nunca por mí hayas venido;
me alejo, te alejas, qué absurdo
y mi plegaria abandona su turno;
todo vuelve a ser distinto,
todo vuelve a ser lo mismo.
2 comentarios:
Hola... me gusta como escribes.. me recuerdas a mi..
Me gustó, se percibe claro el sentimiento
no soy amante de la metrica, pero creo que a ud se le da muy bien
;P
saludos!
Publicar un comentario