viernes, 19 de enero de 2007

DESEO

Que me toque abundante tu espectro
Que corra el mar que hay en tus venas,
como perseguido, cuando vengas
hasta este albedrío postrero

Que se arrojen mis deseos
al abismo de tu vasta piel,
tan bizarros como ayer,
embriagados en el tiempo

Que se suiciden mis miedos
en la cornisa de tus hombros,
aunque me caigan los escombros
cuando te marches tan lejos

Que en cierta noche acallada
se vayan cayendo tus besos
sobre mi acelerado cuerpo,
sobre mi carne inundada

Humedece mi origen tu recuerdo,
leyéndote se estremece mi calma,
llegando a tocarme empapada
tu voz que oigo a lo lejos.

Y se va anegando mi cuerpo
Mi cuerpo que te reclama
Que en tu ausencia se aborrasca,
de tu espera es prisionero.

Que estas manos reclaman
La calidez de tu aliento,
Tus arterias en movimiento,
Tu lacónica espalda.

Quisiera sentirte como las olas
Una y otra vez, meciendo
Mis ondulados secretos,
Mojando todo cuanto toca.

Que arranques de mí este aliento
Que en mi boca vive encarcelado
Que exige el respiro en tu pecho
Y libertad para estar a tu lado.

Voy encrespando mis palabras
Para que puedas leerlas,
Ellas te buscan, te llaman
Y recónditas te esperan.

No hay comentarios: